No necesariamente. Esto dependerá de varios aspectos, pero principalmente se determinará en función de las necesidades de su aplicación y de su presupuesto. Algunas aplicaciones solo requieren la recolección de cantidades de muestra relativamente pequeñas durante la etapa de muestreo primario. En estos casos, no siempre tiene sentido incorporar equipos adicionales para reducir la muestra dentro del sistema de muestreo mecánico. El material de muestra de la etapa primaria simplemente se recolectará y llevará al laboratorio para su procesamiento.
En otras ocasiones, se recolectarán cantidades más grandes y potencialmente engorrosas de material en la etapa primaria, pero los clientes no desean asignar el capital a la compra de equipos adicionales para procesar automáticamente la muestra después de la etapa primaria. En este caso, el personal del laboratorio será el encargado de reducir manualmente la muestra (y posiblemente chancarla). Luego, también será necesario desechar manualmente el material de rechazo. Por lo general, si se requieren cantidades más grandes de muestras primarias, se adquieren equipos adicionales para chancar y reducir las muestras primarias a una cantidad razonable que el laboratorio pueda manipular y procesar de forma sencilla. Este escenario implica mayores costos de capital, pero, en última instancia, demostrará ser más económico, puesto que se elimina una cantidad significativa de manipulación de material. Como suele ocurrir, la mejor forma de manejar una situación es basarse en la aplicación. Es por esta razón que McLanahan alienta a que los futuros clientes se comuniquen con nosotros para analizar sus necesidades de muestreo a fin de que podamos conocer más sobre su aplicación y ofrecerle asesoría personalizada para sus requisitos específicos.