Cómo eliminar más arena
Un ejemplo de esta filosofía es la lechería de la Estación de Investigación Agrícola Arlington de la Universidad de Wisconsin-Madison, ubicada en Arlington, Wisconsin.
Antes de su renovación hace unos años, el sistema de manipulación de estiércol de la lechería con camas de arena era, como mínimo, ineficaz.
¿Cuál era el problema? El enfoque anterior de esta lechería de 500 vacas incluía una única pista de decantación de arena, que solo funcionaba bien en los meses de verano, y una laguna de dos etapas.
La pista de decantación de arena era demasiado pequeña para la lechería, lo que provocaba que el estiércol cargado de arena fluyera hacia la etapa uno de la laguna de almacenamiento. Esta situación reducía su eficacia operativa y empujaba la arena hacia la etapa dos.
“Solo podíamos recuperar entre el 35 % y el 40 % de la arena del estiércol, lo que significa que alrededor del 65 % estaba en el fondo de la laguna”, explica Jessica Cederquist, directora del Programa de Investigación de Rumiantes de la Universidad de Wisconsin-Madison.
Esta situación no era sustentable porque resultaba caro retirar la arena de la laguna. Además, la lechería tuvo que comprar mucha arena para sustituir la que no podía eliminar del estiércol. La ineficiente eliminación de arena suponía aplicar una cantidad significativa de arena a las tierras de cultivo.
¿Cuál fue la solución? La instalación de un separador de arena y estiércol y la ampliación de la laguna de almacenamiento del establecimiento agropecuario marcaron una diferencia significativa en la forma de abordar la gestión del estiércol.
Gracias a este cambio, la lechería recupera ahora cerca del 90 % de la arena del estiércol.
“Tenemos muy en cuenta la arena que compramos”, afirma Cederquist. “Nos abastecemos de arena del fondo del río Mississippi, que se recicla muy bien y, aunque es suficientemente arenosa para la separación, es suave y cómoda para las vacas. Es más cara que la arena que comprábamos antes, pero nuestro costo total de arena ha disminuido considerablemente porque compramos mucha menos”.
Además, con el cambio a la tecnología de separación de arenas, las cargas bacterianas de arena son extremadamente bajas. La arena está lo suficientemente seca como para devolverla a los establos libres en un plazo de tres o cuatro días tras el proceso de separación del estiércol, lo que también reduce el volumen total de arena necesario en las instalaciones.
“Devolvemos al establo la arena más seca y sana posible”, añade Cederquist.
La lechería ha observado una reducción de las lesiones en los corvejones de las vacas, y el recuento de células somáticas, que ya era bajo, descendió otras 30 000 a 50 000 unidades con la conversión de la separación de arena.
El cambio también hizo que la mano de obra pasara de dedicar horas a voltear arena en palas cargadoras a aprender y comprender los matices de los equipos de separación. El equipo da prioridad al mantenimiento preventivo y está en sintonía con la maquinaria. Esto significa que los empleados pueden ser proactivos en lugar de reactivos, lo que disminuye las situaciones de emergencia.
“Tenemos más equipos de manipulación de estiércol que con el sistema anterior, pero funciona 365 días al año, a diferencia de la pista de decantación de arena”, explica Cederquist.
“La manipulación del estiércol es un gran trabajo, y estamos muy contentos con lo que nos ha aportado el sistema”, añade. “Solo hay que tener en cuenta que el mantenimiento es necesario para garantizar que todo funciona como debe, que se necesita arena de mayor calidad para maximizar la eficiencia y que lleva tiempo aprender a mantener el equipo correctamente.
“Para tener éxito, desarrolle y cultive buenas relaciones con sus distribuidores y fabricantes y céntrese en la eficacia a largo plazo de su lechería y en el progreso que el sistema le ayudará a conseguir”, señala.
Cómo vencer la humedad
El estiércol compostado y los sólidos de estiércol digerido pueden convertirse en una cama rentable y cómoda para las vacas, sobre todo si se dispone de abundante material procedente de la digestión anaeróbica. Sin embargo, debe gestionar correctamente estos materiales para lograr el éxito.
Five Star Dairy, en Elk Mound, Wisconsin, dispone de camas para su rebaño de 1.100 vacas con sólidos de estiércol digerido. Dos prensas de tornillo redujeron la humedad de la cama a niveles aceptables, hasta que la antigüedad de los equipos fue mayor y la humedad de las camas aumentó.
Incluso antes de realizar ningún cambio, el rebaño obtenía primas por la calidad de la leche, pero el copropietario de la lechería, Lee Jensen, sentía que podía hacerlo mejor. Quería reducir aún más el recuento de células somáticas al tiempo que mejoraba la salud de las ubres y reducía los índices de sacrificio.
Para lograr estos objetivos y reducir la humedad de las camas a los niveles deseados, Five Star Dairy incorporó una secadora de camas a su sistema. La secadora de camas funciona unas 10 horas al día, seis días a la semana y requiere una mano de obra mínima para gestionar el equipo y proporcionar material de cama adecuado para el rebaño.
Tras la instalación de la secadora de camas, los niveles de humedad de las camas se sitúan ahora en torno al 40 %, cifra que se redujo del 70 % de humedad anterior. Las altas temperaturas de funcionamiento de la secadora también ayudan a eliminar los agentes patógenos que pueden resultar perjudiciales para la salud del rebaño, lo que significa que ahora las vacas permanecen echadas en camas más limpias.
La explotación informó de un descenso del recuento de células somáticas a unos 120 000 o menos, así como de menos casos de mastitis y menos vacas destinadas a un cambio de funciones. Las vacas están más limpias y cómodas que antes, y la cama más seca no se congela durante los meses de invierno, lo que facilita su uso.
Además, desde que Five Star Dairy añadió la secadora de camas, la producción de sólidos lácteos del rebaño aumentó en más de 1 libra por vaca. La producción combinada de grasa láctea y proteína es ahora superior a 7 libras por vaca.
“Este cambio fue una decisión proactiva que facilitó el trabajo de todos en el establecimiento agropecuario”, afirma Jensen. “Siempre que se puede reducir el estrés, todo mejora. Existe una correlación entre el recuento de células somáticas, la comodidad de las vacas, la mastitis y los agentes patógenos”.
Tanto si los desafíos del sistema de estiércol de su lechería requieren cambios sencillos como si requieren cambios significativos, el éxito depende de crear la mejor oportunidad para su lechería hoy y en el futuro.