Al ser capaces de producir tres productos de áridos y dos productos de arena a partir de un depósito, las plantas de lavado modulares, como la UltraWASH de McLanahan, ofrecen una solución integral ideal para sus necesidades de procesamiento en húmedo. El material se limpia, se clasifica por tamaño y se acopia en una sola planta de rápida instalación y fácil operación.
Las plantas de lavado modulares emplean una combinación de zarandas de separación, bombas, hidrociclones, zarandas desaguadoras y cintas transportadoras para limpiar áridos y separarlos en hasta cinco tamaños de producto. Como en McLanahan sabemos que los depósitos no son todos iguales, diseñamos nuestra planta de lavado modular UltraWASH de manera que pueda adaptarse a las gradaciones de muchos tipos diferentes de depósitos.
Por ejemplo, digamos que tiene exceso de arena fina en su depósito, tanto que provoca un cuello de botella en los hidrociclones. Los cuellos de botella nunca son algo bueno. Ralentizan la producción y reducen la cantidad de producto que pasa por la planta por hora.
Cómo eliminar los cuellos de botella
El hidrociclón que procesa la arena más fina funciona según su capacidad normal, y la arena más fina se alinea por detrás en la bomba y en el sumidero a la espera del procesamiento. Sin embargo, el hidrociclón que procesa la arena más gruesa no funciona a plena capacidad, ya que tiene menos arena para procesar. ¿No sería genial si pudiera agregar más cantidad de la arena más fina al lado de la arena gruesa, premezclar el material y equilibrar con eficacia sus equipos aguas abajo?
Presentamos el divisor de finos
En McLanahan pensamos que sí, y es por eso que diseñamos nuestra planta UltraWASH con deslizamiento de finos hacia adelante, una tecnología. El divisor de finos hacia adelante divide el nivel inferior de la zaranda de calibración para separar la fracción de arena fina de la fracción de arena gruesa de modo que la arena gruesa caiga de un lado del sumidero y la arena fina, del otro.
El divisor de finos hacia adelante divide la plataforma inferior de la zaranda a lo ancho. La fracción de arena fina cae en el primer 40 % de la zaranda, mientras que la fracción de arena gruesa cae en la parte restante de la zaranda.
El divisor de finos hacia adelante puede moverse para cortar del lado de la arena fina, lo que significa que se procesa junto con la arena gruesa. Esto reduce la carga sobre el flujo de procesamiento de finos, lo que elimina el cuello de botella y puede aumentar la velocidad de alimentación hacia la planta. La mezcla final del producto de arena primario al combinar los finos con el flujo de arena gruesa se lleva a cabo a medida que los dos flujos salen de la zaranda desaguadora.
Cómo maximizar aún más el rendimiento
Para satisfacer aún mejor las necesidades de depósitos con diversas características, pueden agregarse módulos de depuración, chancado y zarandeo a una planta de lavado modular a fin de eliminar contaminantes, mezclar o clasificar el material, descomponer los depósitos muy aglomerados y separar las partículas de gran tamaño. Los módulos de depuración, chancado y zarandeo pueden instalarse fácilmente en plantas existentes a fin de posibilitar un lavado más avanzado, una mayor reducción del material y una mejor separación de los productos según el tamaño.
Mantenimiento constante
Otra manera en que puede maximizar su producción es realizar tareas de mantenimiento proactivo en su planta de lavado modular. Debe incluirse un programa de mantenimiento mínimo recomendado en el manual de instalación, uso y mantenimiento del fabricante de equipo original (OEM).
Un programa típico contempla inspecciones de rutina una vez por turno (o cada ocho horas de uso), una vez a la semana y una vez cada tres meses, cada seis meses y cada año. Estas inspecciones incluyen la revisión de componentes para detectar signos de desgaste o daños, revisar o cambiar el aceite, y examinar las líneas de agua y electricidad para comprobar que no estén gastadas o dañadas, junto con otras inspecciones recomendadas que se describen en el manual de una planta de lavado modular.
Es muy importante establecer un programa de mantenimiento de rutina y respetarlo. Estas inspecciones pueden revelar la necesidad de realizar reparaciones antes de que se produzca una avería. Tenga repuestos a mano y repare los componentes gastados o dañados lo antes posible para evitar el tiempo de inactividad.
También puede maximizar su producción al proporcionar una alimentación constante y uniforme. A continuación, presentamos algunas prácticas comunes que deben evitarse durante el funcionamiento de la planta:
- Sobrealimentación
- Detención y reinicio de la alimentación
- Variación de las características del material de alimentación
Estos tres factores aumentan el desgaste de la planta y pueden provocar obstrucciones de material y tiempo de inactividad no programado. Si el material pasa de manera continua a través de la planta de lavado modular durante todo el turno, se reducirá el desgaste de los componentes de la planta y usted podrá obtener productos de mejor calidad y un mayor rendimiento.
El mantenimiento proactivo permite garantizar la eficiencia de funcionamiento óptima del equipo, y el deslizamiento de finos hacia adelante ayuda a maximizar la producción.