Los lavadores de tornillo se encuentran disponibles en dos tipos básicos: para material grueso y para material fino.
Los lavadores de tornillo para material grueso están diseñados para lavar menas y áridos gruesos de un tamaño nominal de +5 mm.
Los lavadores de tornillo para material fino típicamente se utilizan para lavar y desaguar arena, finos o residuos gruesos de un tamaño de -5 mm x 0, así como para eliminar arcillas y limos de un tamaño nominal de -75 micras o malla 200. Estos equipos también se conocen con otros nombres como clasificadores de tornillo, clasificadores helicoidales y lavadores de arena.
Actualmente, los lavadores de tornillo para material fino se utilizan ampliamente para desaguar y/o lavar sólidos con una gravedad específica de 2,6 o superior. El tamaño máximo de las partículas sólidas suele controlarse por medio de una zaranda de lavado/vibratoria antes de que el material ingrese al equipo suspendido en una pulpa. Por lo general, el tamaño máximo establecido para la alimentación de sólidos es de 10 mm o 3/8”, pero se puede prever un tamaño más fino.
Aunque los lavadores de tornillo son muy conocidos y valorados en las industrias de los áridos y la minería, existen algunos mitos comunes acerca de estos equipos y su funcionamiento.
Mito n.º 1: Un lavador de tornillo para material grueso es lo mismo que un lavador de paletas
Un lavador de tornillo para material grueso no es un lavador de paletas.
Los lavadores de tornillo para material grueso están especialmente diseñados para lavar rocas y menas con contaminantes de lodo y arcillas solubles que no pueden eliminarse solamente por medio de una zaranda de lavado en húmedo/vibratoria.
En comparación con los lavadores de paletas y los tambores lavadores rotatorios, estos equipos de bajo costo no suelen ser tenidos muy en cuenta. No obstante, es menester destacar su capacidad de lavar la suciedad, el lodo y la arcilla a través de su moderada agitación.
Los lavadores de tornillo para material grueso son adecuados para muchas aplicaciones de áridos para la construcción, así como para muchas plantas de lavado de construcción y demolición.
Para el lavado de áridos para la construcción como piedra caliza, grava, granito y otras menas duras similares, los lavadores de tornillo para material grueso son los equipos elegidos cuando no es posible lavar bien el lodo y las arcillas solubles por medio de zarandas vibratorias de procesamiento en húmedo dotadas de barras de rociado. Si se agrega el volumen adecuado de agua, estos equipos con un costo relativamente bajo y un bajo consumo de potencia (kW/HP) constituyen una opción ideal.
Por lo general, se recomienda complementar la acción de este equipo con una zaranda de enjuague o lavado para garantizar la eliminación de cualquier residuo pegajoso que esté adherido a la alimentación de rocas y menas. En ciertos casos, esto no es necesario.
Mito n.º 2: Los lavadores de tornillo para material grueso no pueden eliminar los contaminantes livianos
Si bien varios proveedores ofrecen plantas de lavado con lavadores de paletas para el procesamiento de materiales de construcción y demolición, en muchos casos, estos equipos costosos y con un alto consumo de potencia (kW/HP) no son necesarios para eliminar la presencia de contaminantes livianos, flotantes y del tamaño de una roca.
Los lavadores de tornillo para material grueso pueden adquirirse con un vertedero de desborde especial que facilita la flotación y la eliminación de los residuos livianos y no anegados. Los sólidos más pesados, de gravedad específica, se decantan y se extraen al igual que otros materiales de calidad semejantes a las rocas.
Los lavadores de tornillo para material grueso se pueden emplear para la eliminación del material liviano en las plantas de lavado de construcción y demolición.
Mito n.º 3: Las paletas reversibles reducen la acción de depuración
En realidad, las paletas reversibles pueden ofrecer una mayor depuración.
Cuando el lavador de material grueso no se encuentra plenamente cargado, es posible dar vuelta algunas paletas para depurar aun más la roca. Esta posibilidad está supeditada al diseño de la paleta y depende del fabricante de cada equipo. Asegúrese de tener en cuenta esta ventaja antes de comprar el próximo equipo para su planta.
Mito n.º 4: Los lavadores de tornillo para material fino son el equipo recomendado para cortar fracciones de arena gruesa
Por lo general, no se recomienda utilizar un lavador de tornillo para material fino en la remoción de sólidos finos de un tamaño superior a 150 micras o malla 100.
Cuando se requiere una separación que oscila entre las 150 y las 800 micras (o malla de 100 a 20), se recomienda el uso de otro tipo de clasificadores, como los Hydrosizers™ (u otros clasificadores similares de corriente ascendente), antes del desaguado en un lavador de tornillo para material fino.
Mito n.º 5: Todos los lavadores de tornillo para material fino se fabrican y diseñan del mismo modo
La mayor parte de los equipos de la competencia tienen una baja tolerancia o un espacio restringido entre el eje del tornillo y la placa de desaguado curva de la caja o el tubo del lavador. Debido a este espacio reducido, la arena abrasiva puede provocar agujeros en el tubo.
La presencia de una brecha más amplia entre el tornillo rotatorio y el tubo estacionario permite la formación de un revestimiento de arena que prácticamente anula la acción abrasiva sobre el tubo de acero templado.
Cuando pida presupuestos para adquirir un nuevo lavador de arena, consulte al distribuidor acerca de este espaciado a fin de comparar el equipo con otras opciones.
Mito n.º 6: Los lavadores para material fino tienen la mala fama de perder arena fina de tamaño adecuado
Si bien esto puede ser cierto en algunos lavadores para material fino, los equipos que cuentan con áreas de piscinas de decantación más grandes y vertederos más extensos ofrecen una mayor capacidad de retención de finos.
El diseño de la caja del lavador realmente marca la diferencia que determina la retención de arena fina de +75 micras o malla +200, según la clasificación de tamaño del producto. Si esta arena desborda junto con los limos y arcillas, ¡usted pierde toneladas de productos por hora!
La presencia de vertederos más extensos y una piscina de decantación más grande le permite depositar más arena en la pila de productos, en lugar de perderla en la piscina de residuos. Verifique el cuadro de capacidad de volumen de agua publicado por el fabricante. Para equipos del mismo tamaño, suele haber una diferencia del 20 % entre un fabricante y otro en términos de capacidad de volumen de agua.
Mito n.º 7: La longitud del eje del tornillo es irrelevante
Los ejes de tornillo más largos ofrecen un mayor tiempo de desaguado, lo cual deriva en la descarga de un producto más seco. La longitud adicional reside totalmente en la sección de desaguado de la plataforma seca de la caja del lavador.
Esto se aplica tanto para los lavadores de material grueso como para aquellos de material fino.
Mito n.º 8: En un lavador de tornillo, el sello del rodamiento inferior debe reemplazarse cada uno o dos años.
Aunque esta es una práctica común para los equipos de ciertos fabricantes, no es un requisito exigido por todos los lavadores de tornillo.
El diseño de los lavadores de tornillo puede incluir sellos de rodamientos con varios años de vida útil. Verifique este detalle con mucha atención. Con un punto de lubricación independiente para el conjunto de rodamientos inferiores sumergidos, se puede extender considerablemente la vida útil de los sellos —en muchos casos de seis a ocho años—, lo cual mejora la disponibilidad del equipo y reduce el tiempo de inactividad.
No todos los fabricantes ofrecen un diseño tan superior. Tener un conocimiento cabal de las distintas ofertas del mercado puede brindarle grandes beneficios y reducir los costos de mantenimiento de su tornillo de arena.