Desde 1919, A.F. Gelhar Co, Inc. en Markesan, Wisconsin, ha visto prosperar su negocio con el abastecimiento de arena de sílice a fundiciones en todo el estado de Wisconsin. En 2009, se dieron cuenta de que se encontraban en una posición inmejorable para aprovechar la creciente demanda de arena de sílice para su uso en la fracturación hidráulica, o fractura, y comenzaron a buscar un sistema que los ayudara a satisfacer la demanda de la industria de la arena de fractura.
Desafío
A.F. Gelhar siempre había extraído arena para fundiciones, pero encontró la manera de diversificar su operación al producir una mezcla de arena de sílice para satisfacer las necesidades de los productores de arena de fractura. Aunque en esencia se trataba de la misma arena, fue necesario implementar un proceso diferente de clasificación por tamaño para producir las fracciones específicas que exige la arena de fractura. Cuando se trata de producir arena de fractura o arena para fundiciones, es importante que la arena no contenga ningún contaminante y se separe por tamaño de grano según se vaya a utilizar para fractura o en una fundición.
“En realidad, la producción de arena para fundiciones y el procesamiento de la arena de fractura son procesos similares”, afirma Kyle Grahn, vicepresidente de A.F. Gelhar. “Lo que necesitábamos era encontrar equipos con la capacidad que requiere nuestra tasa de producción. Queríamos mejorar nuestra manera de trabajar y, al mismo tiempo, ampliar nuestra capacidad”.
Solución
Los directivos de A.F. Gelhar tenían poco tiempo para elegir un sistema, así que en lugar de revisar varias alternativas, Grahn cuenta que tuvieron en cuenta la reputación dentro de la industria cuando decidieron comprar un nuevo sistema de procesamiento de arena de McLanahan Corporation. También comenta que miembros del personal de McLanahan se acercaron a la planta y realizaron un análisis que incluyó evaluar la arena a fin de determinar cuál sería la mejor solución para los requisitos específicos de A.F. Gelhar en cuanto a arena fina y gruesa.
En 2011, el equipo de McLanahan logró diseñar un sistema personalizado que utiliza hidrociclones, un Hydrosizer™ (o separador por densidad), bombas y zarandas desaguadoras. El sistema lava y clasifica la arena de fractura gruesa, además de la arena más fina.
“El sistema nos permite producir dos grados de arena: fina y gruesa. Es fantástico”, cuenta Grahn. “McLanahan diseñó el sistema para optimizar la utilización del yacimiento de arena de la mina”.
Según Grahn, el sistema de McLanahan es fácil de usar, y agrega que le gusta la flexibilidad que otorga a la cantera.
Una vez procesada mediante el sistema de McLanahan, la arena pasa por el proceso de zarandeo, mediante el cual la empresa produce distintos grados, y luego la distribuye por ferrocarril.
Resultados
Desde que instaló el sistema de McLanahan, A.F. Gelhar ha podido aceptar pedidos de arena de fractura con la planta en funcionamiento según lo permita el clima de Wisconsin, por lo general, unos ocho meses al año, de marzo a noviembre.
“Nuestra inversión en el sistema de McLanahan nos ha dado un muy buen rendimiento. Es sumamente confiable y fácil de usar”, dice Grahn. “Este sistema es capaz de funcionar constantemente con muy pocas averías, o ninguna, y eso es importante porque el tiempo de inactividad es algo inadmisible durante nuestra temporada de actividad. Resultó ser un equipo realmente superior”.
Además de la potencia del sistema de McLanahan, A.F. Gelhar aprecia la sólida relación laboral que tiene con los representantes de la empresa.
“El servicio en terreno que ofrecen es excelente. Cada vez que necesitamos algo, sea lo que sea, responden rápidamente, y eso es muy importante para nosotros”, asegura Grahn.
